Las comunidades indígenas Páez del norte del Cauca iniciaron el control territorial en contra del narcotráfico. En ese sentido se inició la erradicación de cultivos de uso ilícito en su primera jornada.
En cumplimiento del mandato comunitario, los indígenas fueron arrancando de raíz, una a una, las matas de coca que habían sido sembradas en el resguardo Huellas, zona rural de Caloto, con fines de narcotráfico.
“No debe haber ningún cultivo ni de coca ni marihuana. Entonces, se dio un plazo hasta diciembre (2018) para que la gente erradicara de manera voluntaria, pero como no se hizo, la comunidad dijo: ‘Ya es un mandato, entonces, vamos a actuar’”, dice Libardo Fernández, gobernador indígena.
Según las comunidades, los cultivos ilícitos solo han generado muerte y violencia en su territorio, por lo que se decidió hacer limpieza de estas matas que matan. Solo se permitirá, según el mandato comunitario, la utilización de estas plantas con fines medicinales.
“Solamente hemos dejado lo necesario y lo necesario para nosotros es, por ejemplo, aquella persona que le gusta mambear la coca. Hemos dejado cinco maticas, dos maticas, en el caso que solo sea para remedio”, señala Gloria Esperanza Conde, gobernadora indígena. En esta primera jornada fueron erradicadas más de diez hectáreas de cultivos ilícitos, la próxima minga se cumplirá el 31 de enero