Con ocho testimonios inició el juicio contra Catalina y Francisco Uribe por presunto ocultamiento y destrucción de material probatorio, pues el día en que se cometió el atroz asesinato contra la pequeña Yuliana Samboní -por el que hoy paga condena Rafael Uribe-, tardaron dos horas en informar a las autoridades.
Según la Fiscalía, borraron conversaciones de WhatsApp y llamadas que hicieron mientras Rafael Uribe estaba internado en una clínica, y varios testimonios apoyarían la hipótesis sobre intención de los hermanos de encubrir cosas.
Por ejemplo, el capitán del Gaula, Gabriel Alejandro Niño, señaló que Catalina no le dio información inmediata sobre el paradero de Uribe, y el médico Leonardo Gómez Acuña, que lo atendió en la Clínica Navarra expresó que Rafael, tras hablar con su hermana no quería ser atendido.
“Después de que se le empezó a dar un manejo inicial al señor Rafael, no sé por qué circunstancia después de que hubo el diálogo entre él y la hermana, hubo un poquito de trabas con respecto a la prestación del servicio médico porque como queda consignado en la historia clínica el paciente empezó a negar a que se le siguiera el tratamiento”, señaló.
Así mismo, el patrullero es William Caballero, señaló que tuvo contacto con Francisco Noguera y un abogado les contó lo que había pasado.
“Tuvimos contacto con el señor Francisco Noguera, en ese momento nos encontramos un abogado, no recuerdo el nombre del señor abogado, y nos manifiesta ‘yo escuché que había ocurrido un accidente con la menor. Que su hermano la llevaba en la camioneta, que se puso a llorar la niña, le había tapado la boca y la había matado”, señaló.
Este martes se reanudará la audiencia a las 8 de la mañana con más testimonios.