Luego de la movilización de más de cuatro mil cafeteros de las diferentes regiones del país que se congregaron en Armenia, las dignidades campesinas acordaron realizar un paro nacional.
No obstante, aseguraron una reunión antes con el Gobierno nacional para ponerle sobre la mesa sus exigencias y problemáticas, por lo que aún no han definido la hora cero.
“Nosotros aprobamos por unanimidad un paro, pero no le pusimos fecha hasta tanto no hagamos una reunión con el Gobierno nacional para explicarle nuestra posición frente al asunto”, dijo Óscar Gutierrez, Vocero de Dignidad Cafetera.
Gutierrez explicó que las dignidades tienen una propuesta de seis puntos, la cual harán pública después de presentársela al Gobierno.
El bajo precio del café, los altos costos de los fertilizantes, el acoso por las deudas y el anuncio de quitarle la salud a muchos caficultores, son algunos puntos que tienen inquietos a los productores.
Según los cafeteros, el tema principal que tiene que solucionar el Gobierno es que se destinen realmente los $250.000 millones para el sector, ya que hasta la fecha ningún productor ha recibido los subsidios anunciados.
Cabe mencionar que hace unos días, la misma Federación Nacional de Cafeteros advirtió que Colombia ya está viviendo una crisis humanitaria, ya que los actuales precios tienen a los cafeteros “aguantando hambre”.
Según el presidente de la Federación, Roberto Vélez, los países de América Latina tampoco son ajenos a está situación.
“La crisis humanitaria ya se está viviendo en Colombia y en la región; los pequeños productores no tienen suficientes ingresos para pagar sus deudas ni para comer. En Perú uno ve las fotos de fincas abandonadas, ya se está hablando de paros y huelga; todo esto es una tragedia humanitaria para los países productores y tiene como origen los bajos precios del café que ni siquiera cubren los costos de producción”, añadió.
De acuerdo con la Organización Internacional del Café (OIC) alrededor de 25 millones de familias, producen café en el mundo y la mayoría de ellos ni siquiera pueden cubrir sus costos de producción para llevar un sustento a sus familias.
El organismo señaló que esta crisis del sector cafetero debe abordarse urgentemente para buscar las salidas necesarias antes de que se convierta en una crisis humanitaria.