Las acciones investigativas lideradas por la Fiscalía General de la Nación para bloquear los corredores ilícitos de la criminalidad y el narcotráfico permitieron identificar un gigantesco laboratorio de producción de clorhidrato de cocaína, que pertenecería a la estructura Franco Benavides de las disidencias de las Farc.
Investigadores del CTI, con apoyo del Ejército Nacional, se trasladaron a zona rural de Policarpa (Nariño) y constataron la existencia del complejo narcotraficante. En el lugar encontraron varias estructuras rústicas de madera, tela y plástico negro, comunicadas entre sí. De igual manera, hallaron maquinaria, insumos químicos y otros elementos dispuestos para el procesamiento a gran escala de estupefacientes.
Durante el procedimiento fueron detectadas 4.8 toneladas de cocaína que estaba lista para ser empacada. El alijo sería trasladado a las costas del Pacífico nariñense y, posteriormente, embarcado con destino a Centroamérica. Asimismo, se hallaron 1.100 litros de cocaína en solución.
El megalaboratorio tenía áreas dispuestas para macerar la hoja de coca, y filtrar la base de coca y los precursores químicos; además de mesones de secado, un espacio amplio para el embalaje de los bloques de estupefaciente, una cocina con víveres y un alojamiento para albergar algo más de 12 personas.
Los resultados obtenidos en la diligencia fueron legalizados por un fiscal de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico ante un juez de control de garantías.