En una operación dirigida a combatir los delitos ambientales, las Fuerzas Militares desactivaron, en las últimas horas, una maquinaria utilizada para la extracción ilegal de recursos minerales en la vereda San Antonio de Gurumendo, ubicada en el área rural del municipio de López de Micay, en la costa caucana del Pacífico. Estos equipos eran utilizados para la extracción de minerales como el oro, mediante el uso indiscriminado de químicos, causando un grave daño al ecosistema local. Según la información recopilada por agencias de inteligencia militar y policial, estas actividades ilegales generaban mensualmente cerca de 37 kilos de oro, con ganancias que superaban los ocho mil millones de pesos. Estos fondos ilícitos se destinaban a financiar redes logísticas y criminales pertenecientes al grupo armado organizado conocido como estructura Jaime Martínez, una disidencia de las Farc. Además del decomiso de la maquinaria, se ha intervenido un área estimada en 15 hectáreas, equivalente a 132,000 metros cúbicos, con el fin de detener la deforestación que afectaba a cerca de 9000 árboles. El valor estimado para la restauración ambiental de esta zona se estima en 2000 millones de pesos, con un tiempo estimado de recuperación vegetal de más de 30 años.
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