En el norte de la ciudad de Popayán, 215 internos de la Cárcel y Penitenciaria con Alta y Media Seguridad San Isidro, que pertenecen a comunidades indígenas, se declararon en huelga de hambre indefinida, luego de revelar presuntas irregularidades por parte del INPEC, donde al parecer no se estaría dando cumplimiento a acuerdos para permitir el ingreso de encomiendas con productos no perecederos; de acuerdo con los reclusos, no tienen elementos como “azúcar o café”.
Según se pudo conocer, los internos del patio 4 del centro reclusorio, manifestaron su voz de rechazo, tras siete meses de no tener respuesta para permitir el ingreso de alimentos no perecederos. Nelson Dagua, coordinador de Derechos Humanos del Pabellón Especial de Indígenas denunció que “Nos prometieron surtir el expendio, pero hoy no hay ni azúcar ni café; los estantes están vacíos”.
Frente a esta situación, se indica que serían más de dos mil reclusos los afectados, por lo que insistieron que es necesaria la instalación de una mesa de dialogo que permita encontrar una solución real a la crisis de abastecimiento al interior de la cárcel.
Finalmente, desde el INPEC hasta el momento no se ha dado un pronunciamiento oficial, por lo que se espera que organismos de defensa de Derechos Humanos, así como entes de control se apersonen del caso para establecer una hoja de ruta y plantear soluciones frente a la problemática.
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