Las características geológicas y geográficas del Huila la ubican en el mapa global de riesgo sísmico. Debido a esto está entre los departamentos con altas probabilidades sísmicas, en la zona se presenta eventos sísmicos constantes, algunos más fuertes que otros.
Pese a la intensa actividad el volcán se mantiene estable y en alerta amarilla. Las autoridades indicaron que se encuentra activo y calmado.
Sin embargo, una serie de sismos en cadena registrados en la mañana del sábado generaron alerta lo que ocasionó que se activaran las alarmas ante el posible riesgo de un movimiento telúrico de gran impacto.
El Sistema Geológico Colombiano reportó siete temblores en menos de cuatro horas. El más fuerte ocurrió a las 7:32 de la mañana con una profundidad de 9 kilómetros, magnitud local 5.4, con epicentro en el municipio de Planadas (Tolima) a 12 kilómetros al noroeste del Pico Central del volcán Nevado del Huila, con réplicas que fueron a su vez reportadas a las 8:10, 8:27, 8:46, 9:35 y 10:12 a.m., de acuerdo con el informe oficial.
Ademas de otros riesgos en el departamento del Huila existen algunos que son permanentes y están identificados por la Unidad de Gestión del Riesgo como lo son el desbordamientos e inundaciones; avalanchas, los derrumbes, remociones en masa, además por su ubicación geográfica y variedad de pisos térmicos presenta altas probabilidades de sequía, incendios forestales.
En total cuatro municipios del departamento del Huila, reportaron daños materiales: Palermo, Paicol, Yaguará y Teruel.
Elver Rodríguez, subcomandante del Cuerpo Voluntario de Bomberos de Palermo indicó “en el Colegio San Juan Bosco del municipio de Palermo, se hallaron grietas y fisuras, una casa resultó averiada y en la terraza de la Institución Educativa se generaron grietas y afectaciones en una vivienda del barrio Altico, en Paicol se generó el agrietamiento de algunas paredes de la ESE Santa Rosa de Lima y en un hogar para ancianos”.
Isabel Hernández Ávila, coordinadora de la oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres, “en la vereda Gualpí de Teruel se registró el colapso de una vivienda sin víctimas, debido a que se encontraba deshabitada y en avanzado estado deterioro. En el casco urbano, un local de un supermercado de cadena presentó agrietamiento de paredes”.
La funcionaria indicó que en el municipio de Yaguará se desplomó el techo de la estación de bomberos voluntarios.