Capturan a cinco policías que integraban banda que traficaba armas y droga en Cali y que serían los responsables del asesinato de Karina García, candidata a la Alcaldía de Suárez. Fueron 16 personas en total las capturadas, entre ellos cinco policías, señaladas por las autoridades de pertenecer a la banda ‘Mercaderes de la muerte’.
Uno de los capturados fue identificado como alias Miller, presunto integrante de las disidencias de las Farc. Esta persona sería el enlace entre la red criminal y la disidencia ‘Jaime Martínez’ que es señalada del crimen de Karina García Sierra, candidata a la Alcaldía de Suárez, en el norte del Cauca.
Además de las capturas, fueron incautadas doce armas de fuego, munición y accesorios como silenciadores y proveedores, así como elementos tecnológicos, 26 radios de comunicación, y 1.7 toneladas de marihuana, una de las armas fue empleada en cruel asesinato de la dirigente política. Por ahora no se conoce quien es el responsable intelectual del crimen, pero las autoridades están muy cercanas de conocer la verdad.
Luego que la Policía Nacional informó sobre la captura de una banda que se dedicaba al tráfico de armas desde Estados Unidos a Colombia, al igual que de narcóticos y que está involucrada en el asesinato de la candidata a la alcaldía de Suárez, Cauca, el pasado 2 de septiembre. Se conoció que, dentro del atentado se usaron fusiles AK-47, mismos que fueron incautados a la banda desmantelada.
Al parecer, esta fue la encargada de suministrar el armamento con el que se realizó la masacre, al igual que del 78% de atentados que ocurren en esa región del país, por lo que al parecer cometieron un sinnúmero de hechos de sangre y masacres en el Cauca. La banda tenía como cabecilla a Luis Aristizabal, alias ‘Álvaro’, quien cayó junto a 16 personas más.
Entre los detenidos se encuentran seis uniformados, quienes también serían partícipes del asesinato a Karina García. Asimismo, las autoridades añadieron que la banda traía las armas mediante la modalidad de envíos urgentes en agencias de correspondencia. También por vía de la Policía, donde los uniformados corruptos eran encargados de sacarlas y suministrarlas a las bacrim.