La situación social del departamento del Cauca es hoy muy difícil a pesar de esa riqueza que en todos los aspectos tiene la región, según el Arzobispo de Popayán, Monseñor Luis José Rueda Aparicio.
Indicó que de esas dificultades se debe aprender a creer para recuperar la confianza entre la sociedad civil y la institucionalidad.
“La vida está herida y la vida nos necesita”, afirmó el prelado de la iglesia católica, al sostener que “la confianza también está herida y que se requiere con urgencia reconstruirla a través del respeto hacia el otro”.
Monseñor Rueda Aparicio, expresó su voluntad como la de otros miembros de la iglesia Católica para buscar los acercamientos que permitan superar la crisis humanitaria que se presenta en municipios del norte del Cauca luego de las masacres, las amenazas y de otros asesinatos.
Destacó la labor que vienen cumpliendo con el propósito de restablecer el diálogo, la Defensoría Nacional del Pueblo, la Procuraduría, la Fiscalía y la misma fuerza pública. Finalmente, exhortó a la comunidad a salir del pesimismo.