Finalizó una nueva edición de la Vuelta a Colombia y en esta ocasión, como en muchas anteriores, la Federación Colombiana de Ciclismo, con el apoyo del Ministerio del Deporte, organizaron un evento que colmó las expectativas del quienes hacen parte de la fiesta de la dos ruedas en el país. Un esfuerzo conjunto que estuvo a la altura en diferentes frentes: transporte, alojamiento, alimentación, protocolo deportivo, logística, juzgamiento, personal logístico y atención médica, además de la competencia que recorrió gran parte de la geografía nacional, que contó con una inversión de Mindeporte por valor de 1.500 millones de pesos y que puso su punto final en Bogotá donde se cerró la edición 71 con el título de José Tito Hernández, del Team Medellín.
“Ha sido una vuelta muy bien organizada, la federación hizo un uso adecuado de los recursos. Por ejemplo, sucedió algo que no pasaba hace muchos años y es que les pagaron el hotel a todos los equipos, en todas las ciudades, que es algo muy importante que no solo garantiza un buen descanso y desempeño de carrera, sino que también es un alivio económico para las escuadras. A nivel organizativo se vio muy bien en salidas, llegadas, la logística y los cierres. Se ha cumplido con creces en esta organización”, destacó Luis Alfonso Cely, director del equipo Colombia Tierra de Atletas, que tuvo una destacada actuación en la competencia y que ganó las últimas dos etapas con Darwin Atapuma y Óscar Quiroz
Pero la entidad no solo centró sus esfuerzos en la organización de la competencia, en pro del fomento de este deporte en el país también realizó una inversión de 7.000 millones de pesos para apoyar a esta disciplina en diferentes áreas: el equipo Colombia Tierra de Atletas-GW, que nació con la idea de mostrar el talento joven y de posicionar el ciclismo nacional a escala mundial, y que contó con un apoyo de 4.700 millones de pesos para crear escuadras en ramas masculina, femenina y el equipo Sub 23.