El reclutamiento de menores de edad en municipios del norte del Cauca fue denunciada ante la comunidad internacional e instituciones garantes de los derechos humanos, según el consejo regional indígena del Cauca, CRIC. Niños, niñas y adolescentes de varios resguardos indígenas han sido obligados por grupos armados organizados residuales, disidencias de las FARC a dejar a sus padres y el estudio para que hagan parte de esas organizaciones criminales.
Trascendió que se ha reportado la desaparición de menores de edad en los municipios de Piendamó, Caldono, Caloto, y Santander de Quilichao. Mientras voceros del comité de derechos humanos del CRIC ratifican los hechos, lo mismo que la aspirante a una curul de la circunscripción especial de las víctimas en la cámara de representantes Diana Socorro Perafán Hurtado, el comando de la policía Cauca se limitó a manifestar que está verificando la denuncia.
Dice en un breve comunicado que “De acuerdo con información suministrada vía celular por las directivas de esta institución educativa, se descarta que hombres fuertemente armados hayan ingresado y secuestrado a los jóvenes estudiantes al interior del centro educativo”.
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