Una gran movilización por la vida en el Cauca tendrá que realizarse para evitar que siga el derramamiento de sangre, según propuesta de la comisión de derechos humanos a monseñor Omar Alberto Sánchez Murillo en su calidad de arzobispo de la arquidiócesis de Popayán, con el objeto que lidere esa convocatoria ante la preocupación que reina en los cuatro puntos cardinales del departamento por la ola de violencia que se mantiene por la presencia de los grupos armados organizados residuales.
El Presidente y Vicepresidente de esa comisión, Oscar Rodrigo Campo Hurtado y Jhon Jairo González Agudelo suscribieron una comunicación al prelado de la iglesia católica dando a conocer que “las cifras de la violencia que azotan al departamento del Cauca nos tienen perplejos a los caucanos, quienes con desespero tocamos puertas buscando detener lo que pareciera imparable: Las masacres, los feminicidios, la deserción escolar, el reclutamiento y la pérdida de valores en una nueva cultura que las mismas economía ilegales parecieran imponer”.
Le piden a monseñor Sánchez Murillo líder esa gran convocatoria para impulsar la movilización por la vida. Le dicen que “que bajo la legitimidad e independencia de su liderazgo se podrá llevar a cabo y encontrar así, en la movilización de la ciudadanía, la manera más eficaz y contundente de decirle a los violentos que estaremos unidos y seremos más fuertes que el horror de sus acciones”.
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