Ante las confrontaciones entre grupo armado organizado residual, disidencias de las FARC contra el ELN en sectores rurales de los municipios de Caldono y Silvia, las familias indígenas están confinados y con temor, según lo denunció Edwin Guetio, coordinador del programa de defensa de la vida y los derechos humanos del consejo regional indígena del Cauca, CRIC.
Esos enfrentamientos que se iniciaron el viernes en horas de la tarde en el resguardo indígena de Pueblo Nuevo y que dejaron un comunero muerto y tres personas más heridas incluida una menor de edad, se extendieron a otras zonas rurales en límites de esos dos municipios afectando esencialmente a la población civil.
El vocero del CRIC llamó la atención de la defensoría nacional del pueblo, al gobierno del presidente Gustavo Petro y a organizaciones internacionales de derechos humanos para que se apersonen de los intensos combates que se han estado dando entre los grupos armados al margen de la ley por el control del territorio.
Exhortó al coordinador del programa de defensa de la vida y los derechos humanos del CRIC, Edwin Guetio a que esos grupos armados ilegales respeten la autonomía y el territorio de las comunidades indígenas.
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