Movistar confirma que, en 2023, se vieron afectados más de 270 mil clientes a nivel nacional debido al vandalismo sufrido en sus redes de cobre y fibra óptica, afectando la productividad de los territorios en el país e interrumpiendo las actividades básicas como el teletrabajo, la educación, la comunicación, entre otras.
En el transcurso del año se presentaron más de 5 mil eventos en contra de la infraestructura de red, generando perdidas para Movistar por más de 7 mil millones de pesos, representadas en mano de obra, reposición de los equipos y reparación de las redes primarias y secundarias, las cuales permiten conectar masivamente a la población. Además de generar impactos negativos en la rentabilidad de la empresa, este flagelo significa también una grave afectación a las operaciones de los sistemas de salud, las entidades públicas y privadas que dependen de la tecnología para brindar sus servicios a la comunidad, adicionalmente del riego público que significa tener redes expuestas tras el vandalismo.
Esta es una problemática que presenta un incremento gradual año tras año y que se vive en todos los departamentos del país, sin embargo las regiones más críticas son: Atlántico, Cesar, Huila, Bogotá, Santander, Quindío, Valle del Cauca, Tolima, La Guajira y Magdalena.