Tras los recientes atentados y asesinatos de guardias indígenas en el norte del Cauca, el gobierno departamental anunció el lanzamiento de un plan de recompensas hasta por 300 millones de pesos, con el fin de dar con los cabecillas e integrantes del Grupo Organizado Residual (Gaor) ‘Dagoberto Ramos’.
Esta disidencia de la guerrilla es señalada como una de los responsables del asesinato de líderes de esta comunidad aborigen en el norte de la región del país.
El gobernador del departamento, Óscar Rodrigo Campo, dijo que con esta estrategia se busca dar un golpe a esas estructuras criminales que se disputan el manejo del narcotráfico y que están generando problemas en municipios como Toribío, Miranda, Corinto y Caloto, donde se presentan choques entre las comunidades indígenas y esas estructuras.
”Queremos que nos aporten información que nos permita dar con cabecillas como alias ‘Mayimbú’, ‘Javier’, ‘El Indio’, ‘Barbas’, entre otros”, expresó el mandatario. Campo recalcó que, de acuerdo a la información de inteligencia con la que cuentan las autoridades, que no se ha comprobado la presencia de carteles mexicanos en la región.